Las gachas dulces es un postre típico de la Semana Santa en muchos lugares de España. En Málaga hay dos maneras tradicionales de acompañar las gachas: con canela molida y pan frito, o con miel (preferentemente de caña) y frutos secos, que es la versión que hoy os presento.
En cada casa se elaboran de una manera peculiar. Es muy malagueño tostar la harina en aceite y después ir ligando la leche, aunque las recetas más antiguas las elaboran con agua. También puede cambiar la manera de aromatizar las gachas: se puede añadir en el aceite caliente la matalahúga y el limón, o hervir estas en la leche junto a una ramita de canela.
Aun siendo una receta tan típica de la Semana Santa, mi madre no llegó a heredarla puesto que ella nunca las ha hecho, pero sí se acuerda haberlas comido. Más me gustaría saber cómo las hacía mi abuela. Investigando por mis libros de cocina tradicional y por internet, he combinado cantidades dando con la receta que sabía que me gustaría, y así ha sido. Ya no me van a faltar unas gachas dulces en ninguna Semana Santa.
INGREDIENTES (6 personas):
- 750 ml. de leche
- 4 cucharadas soperas de azúcar (60 gr. aprox.)
- 75 gr. de harina de repostería
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- Una cucharada sopera de matalahúga (semillas de anís)
- Cáscara de un limón
- Un palito de canela
- Miel de caña
- Frutos secos (almendras, pasas y piñones)
PREPARACIÓN TRADICIONAL:
- Calentamos durante unos 10 minutos la leche a fuego lento con la cáscara de limón, la canela, la matalahúga y el azúcar. Removemos continuamente para que la leche no se pegue. Dejamos que se enfríe completamente.
- Quitamos la canela y la piel de limón de la leche (también se pueden quitar las semillas de anís, yo se las dejo).
- Calentamos el aceite en una olla. A continuación echamos la harina y la tostamos.
- Vamos agregando poco a poco la leche y removemos muy bien con unas varillas.
- Cuando la mezcla esté bien espesa retiramos del fuego y la echamos en una fuente o en cuencos individuales. Dejamos que temple un poco.
- Echamos la miel de caña (al gusto) y los frutos secos.
- Conservamos en el frigorífico cubierta de papel film.
Que recuerdos me trae esta receta. Muchas noches esta era la cena de mis tres "abuelas", ellas no le echaban frutos secos y las hacían con cuscurrones de pan frito. A ver si las hago y las publico.
ResponderEliminarBesitos y gracias por traerme buenos recuerdos a mi mente.
Me alegro haberte traido buenos recuerdos, sé que está más extendida la versión con pan frito, pero sabía que la versión con miel y frutos secos que se hace en otros muchos pueblos de Málaga, me iba a gustar más.
EliminarUn besazo
Ole, ole y ole !!!!! Dios, qué recuerdos....y como dice Olimpia, con curcurrones de pan frito es como se hacían en mi casa.....aunque tal y como tu la has preparado es una exquisitez, una maravilla......
ResponderEliminarTengo que hacerlas.....
Besitos y feliz fin de Semana Santa....hasta el lunes preciosidad.
Y lo mejor es que son tan fáciles de hacer y tan ricas. Haz dos cuencos y a una echale la miel y los frutos secos, ya verás que delicia. U besito
EliminarMe encanta, que buena pinta Laurita y la matalahuva me encanta yo le hecho una cucharadita siempre al té y le da un sabor y un olor que me gusta mucho, si pudiera coger un cachito de de esas gachas humm!!!, besitos guapa y feliz semana
ResponderEliminarHazlas que son muy rápidas y verás que postre. Yo también utilizo laatalaúva en el té y en bizcochos y en otra repostería. Me encanta su sabir. Un beso!
EliminarTienen una pinta buenísima y es que no hay nada como las cosas tradicionales.
ResponderEliminarBuen día
Pues sí Marus, las recetas tradicionales nunca fallan. Un beso
EliminarLaurita, qué buena pinta tienen estas gachas! Mira tú por dónde que yo no me acuerdo que en Semana Santa, en Jaén, tomáramos gachas. A lo mejor sí, pero ya te digo que no recuerdo.
ResponderEliminarSí es muy típico tomarlas la Noche de ´todos los ´santos.
Se ven deliciosas, menudas fotos!!!
En cada sitio hay costumbres diferentes, y es verdad que he leido que las gachas en Jaén son para el día de todos los santos. Así que recuerdas bien jeje. U besote.
EliminarNunca las he probado, pero viendo lo que llevan y la pinta que tienen deben estar riquísimas! qué pena no haber heredado de tu abuela una receta tradicional, estas cosas no deberían perderse..
ResponderEliminarUn besito ;)
Pues si que lo están, wada, te aconsejo que las pruebes. Mi a uela murió cuando tenía cinco años y mi madre apenas cocinó con ella porque era la menos de once hermanos, era la pequeñaja, eran mis tías mayores la que siemore estaban al ladito de mi abuela para cocinar.
EliminarU besito
Recuerdo que cuando tenia unos once o doce años, les hacia a mis hermanos mayores una preparación muy similar, no le ponía las almendras.
ResponderEliminarEs un postre muy delicioso.
Saludos
Con once años ha hacía usted preparaciones como esta? No deja de sorprenderme. Lo mejor de te postre es que con unos ingredientes tan humildes se pued hacer una delicia como esta.
EliminarUn beso
ami me recuerdan con pan frito tambien pero estas tienen muy pinta
ResponderEliminarSí, son más típicas con pan frito, pero yo las prefiero con frutos secos. Muchas gracias!
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